Invita a la naturaleza al interior con una hermosa lámpara de madera de nuestra gama Valor por dinero. La madera puede aportar calma y ligereza a una habitación, y este material clásico siempre ha desempeñado un papel importante en el diseño de interiores escandinavo en particular, a menudo por la misma razón. En una oficina monocromática, una pequeña lámpara de sobremesa de madera puede marcar la diferencia, y en el salón y la cocina, una lámpara de pie o colgante de madera puede aportar la calidez que necesita tu espacio. Este material versátil tiene muchas tonalidades y, según el tipo de madera que elijas, puedes conseguir aspectos muy diferentes. El abedul, el haya y el fresno, por ejemplo, son maderas claras que dan un aspecto ligero y aireado. El roble, la caoba y el nogal aportan calma y calidez con su expresión oscura. Vea nuestra selección a continuación.
Por supuesto, también tenemos muchas lámparas de madera fuera de esta gama.
Con una lámpara de madera, obtienes un producto precioso que añade acogimiento, calidez, aire y vida a tu hogar. Las lámparas de madera vienen en todas las formas y tamaños, y tanto si se trata de una lámpara de pie de madera, una lámpara de techo, una lámpara de mesa o una lámpara colgante, estamos seguros de que encontrará exactamente lo que busca en nuestra selección. Tenemos lámparas tanto de madera maciza como de laminado y de todos los precios.
Las lámparas de madera son una forma fácil y extremadamente elegante de introducir vida en la habitación. La madera, por su origen natural, aporta una expresión orgánica al hogar, y la madera tratada, con sus vetas y su textura única, confiere a la lámpara un exceso de naturalidad.
Lo natural contribuye a lo doméstico. Por ejemplo, si vives en una habitación muy luminosa, con paredes blancas y un interior tenue, la madera es una forma estupenda de introducir algo de calidez en la habitación; calidez y vida que, en primer lugar, destacará por sí misma, pero que luego acentuará la luz a su alrededor. Para este fin, recomendaríamos una especie de madera más oscura, ya que contrastará y embellecerá aún más el entorno. Maderas como el roble, la caoba y el nogal transmiten una calma y una elegancia difíciles de igualar con otros materiales que no sean ellas mismas. Las vetas oscuras, las texturas intrigantes y el tono profundo son un testimonio tanto de la historia como de los fuertes árboles de los que procede la madera.
Por el contrario, puedes introducir mucha luz, aire y vida con maderas de colores claros. El abedul, el fresno y el haya tienen un color más claro y, aunque tienen mucha textura como sus homólogos más oscuros, estas maderas claras tienen un color menos intenso y, por tanto, parecen más claras en el interior. Son estupendos como colores brillantes en un interior oscuro, o en un interior concurrido.